viernes, 18 de julio de 2008

20.- Argentina. El Manillar

Nuestro paso por Argentina ha sido mas rápido de lo que nos hubiera gustado, sabemos que nos hemos dejado muchas cosas por ver y por hacer, pero a estas alturas de nuestro viaje, fue cuando hicimos cálculos del presupuesto y decidimos cruzar el charco hacia Nueva Zelanda y Asia, así que nos entró un poco el agobio y no lo hemos disfrutado al 100 x 100 como nos hubiera gustado, aunque por supuesto que lo hemos disfrutado y nos hemos sentido muy a gusto en todos los sitios. En Argentina siempre hemos tenido la sensación de estar en Europa, nunca nos ha faltado nada, eso si, un poquito mas caro a lo que estábamos acostumbrados, pero que chuletones, que parrilladas, madre mía!

No entramos con buen pie, ya que en la frontera nos vendieron un billete de bus que luego resultó que no salia a la hora que decían, nos mosqueamos, tenemos que esperar en Villazón tres horas, así que nos vamos a tomar un menú de 1, 2, bebida y postre por 3 euros y ya se nos pasa el mosqueo.

Nuestra 1a parada es en San Salvador de Jujui, tenemos muy buen viaje ya que aparecen de nuevo las carreteras asfaltadas y con señalización vial, esto ya es otra cosa, desayunamos café de verdad, croissants y bocatas de jamón y queso. Damos una vuelta por la ciudad y visitamos lo típico; plaza central, catedral, vamos a misa, calles peatonales y algún que otro monumento de interés. Por la calle (a las afueras del centro) vemos muchos puestos de comida que anuncian "PANCHOS" y todo valientes e intrépidos nos animamos a probarlos, y resultó ser el perrito caliente de toda la vida, y nosotros tan contentos, claro!


De allí nos fuimos a Salta. Aquí los autobuses ya son otra cosa, muy cómodos, espaciosos y al entrar te dan unas galletitas, eso si, al que te coloca la mochila hay que darle una propinilla, empezamos dando 2 pesos (unos 0,50 euros) y terminamos dando 0,25 pesos, claro, que si protestaban (que era lo normal) le dábamos algo mas, creo que nos hemos vuelto demasiado cutres. En Salta nos alojamos en un hostal, no muy céntrico, pero que está muy bien, salimos a callejear y toda la mañana pateando y apenas vemos gente, nos parece una ciudad fantasma, pero de repente son las 17:00 horas y todas las calles cobran vida, vaya ambientazo, menudo cambio de ciudad. El hostal tiene cocina, así que nos hacemos la comidita y compramos vino que por estas tierras esta muy rico. Aprovechamos para lavar ropa, descansar, cortar el pelo a Oscar e intentar arreglar sus rastas (misión imposible).


Uno de los grandes retos al entrar en Argentina ha sido comprar la revista "El Manillar", una revista de motos que Oscar leía por internet desde Madrid, hemos ido de quiosco en quiosco sin ningún éxito.


En Salta pasamos el día paseando, comiendo empanadas (que están riquísimas), jugando a las maquinitas (como cuando teníamos 15 años no lo hicimos...) y por supuesto preguntando por la revista "El Manillar" (a estas alturas ya hemos debido preguntar en unos 100 quioscos, y nada que Osquitar no se da por vencido).


Un día nos fuimos a San Lorenzo a 10 Km de Salta y dimos un paseo muy chulo por la quebrada, otro día dejamos la mochilonas en el hostal y nos fuimos a pasar un par de días a Cafayate, los paisajes del camino son muy bonitos, parece que estamos en el Oeste, allí subimos al Cerro de Santa Teresa desde donde se pueden ver un montón de viñedos, por lo que al descender lo primero que hicimos fue plimplarnos una buena botella de vino con un trozo de cabrito. Desde allí intentamos ir a Cachi, pero nada, que la única manera de ir era con un tour pagando un pastón, así que lo dejaremos para la próxima vez, je, je, y de vuelta a Salta.


De Salta nos vamos a Resistencia, 12 horas de viaje, 3 películas y nos dan la cenita, esto está muy bien, que lejos queda el ruteado. Como a Resistencia llegamos a las 6:30 a.m. sin saber muy bien que teníamos que hacer allí, dejamos las mochilas en consigna y nos vamos a recorrer la ciudad, paseo por su gran plaza, visita al museo de telecomunicaciones (porque era gratis), entramos en la catedral (que nos sorprende que no tenga nada de decoración, ni una sola imagen). Volvemos a la estación con intención de ir a Corrientes pero el puente esta cortado, no se que jaleos se traen, que solo lo abren de madrugada, total, que volvemos a dar otro paseo por la ciudad y terminamos yendo a Posadas, el autobús es nocturno, así que tan contentos que nos ahorramos otra noche de hotel (ya os digo yo que nos hemos vuelto muy cutres).


LLegamos a Posadas a las 5:30 a.m. a esas horas estamos medio dormidos, medio atontados (si, más de lo normal) nos sentamos en un banco de la estación sin saber muy bien que hacer y finalmente nos decidimos a tomar y no a "coger" (que ya nos ha costado alguna que otra bromita) otro bus a San Ignacio Mini.


En San Ignacio Mini vamos a ver las ruinas de las misiones llamadas "Reducciones Jesuitas-Guananies", nos gustan mucho, consisten en los restos de una gran plaza presidida por la iglesia y a los lados las viviendas de los padres, colegios, talleres, cementerio, hospital y a continuación las viviendas y cultivos de los Guananies. Por la noche volvemos y esta vez con visita guiada y espectáculo de luces y música, y además hay luna llena, así que lo flipamos tanto que os voy a contar brevemente su historia:



"Millares de indígenas vivían del cultivo, caza y recolección. Hasta que en el siglo XVI, empezaron a llegar los conquistadores y colonos españoles (mecachis!!!). Poco tiempo después, esos habitantes originarios eran mano de obra de españoles y portugueses que los explotaban para sostener económicamente sus colonias y haciendas. Pero también estaban las misiones de las ordenes religiosas, estas en concreto fueron una construcción social totalmente novedosa. Intentaron imponer los valores humanistas de la cultura europea tolerando aquello de lo indígena que consideraban adecuado (no podía ser perfecto, claro!)". El caso es que al vivir aquí perdían la libertad de la que gozaban viviendo en la selva, pero a cambio conseguían comida y protección. Y en estas misiones se crea una mezcla de cultura y arte muy bonito, ?Que os a parecido?.


De allí nos fuimos a Puerto Iguazú a visitar las cataratas, donde nos pasamos un día entero pateando el parque; hicimos el sendero verde, vimos las cataratas desde abajo, desde arriba, tomamos un bote (gratis) a la isla San Martín, la pateamos entera, pagamos otro bote para que nos metiera debajo de una catarata y nos empapara enteros (una chorrada, pagamos la guirigada), paramos a tomar el bocata que nos habíamos preparado y en seguida empezaron a acercarse unos bichos tipo mapache-osos hormigueros, Oscar lucha ferozmente para que no le quiten su bocata de salami, tomamos el trenecito ecológico a ver "la garganta del diablo", una chulada, impresionante!!!













Al día siguiente tomamos un bus de 15 horas a Santa Fe, y lo primero es lo primero, preguntar por la revista "el manillar", sin éxito (y yo empiezo a tener pesadillas con la puñetera revista). Hacemos las visitas de rigor, plazas, calles peatonales, iglesias y como curiosidad deciros que por estas tierras la plaza mayor se suele llamar "Plaza 25 de mayo", y fíjate! hoy es 25 de mayo, así que a celebrar la independencia de España, a todo el mundo le dan una banderita de Argentina y a nosotros por españoles nanaina! Hay música, bailes, gente vestida de época, dan pastelitos típicos y esta vez no abrimos la boca a ver si también nos lo niegan.

Allí nos juntamos a tomar unas cervezas con Victoria y Andrés, con los que habíamos coincidido y pasado muy bien en el piso patera de Panama City, curioso, no?.

Por fin Probamos el Locro, riquísimo, pero después de estar 3 horas dando vueltas por el Parque M. Belgrado todavía seguíamos haciendo la digestión.


Por si teníais alguna duda sobre nuestra anorexia, deciros que por estas tierras nuestra dieta ha sido de churrascos, milanesas (de ternera, pollo, merluza...) marineras, napolitanas, papas fritas, quilmes, mucha quilmes, costaleta, bifes, parrilladas, tira de costillas asadas, alfanjores..., vamos! que no creo que nos encontréis desmejorados a la vuelta, je, je


De Santa Fe nos fuimos a Buenos Aires, los primeros días de tramites ya que necesitábamos el carnét internacional para conducir en Nueva Zelanda, así que nos pasamos un día entero en la embajada de España, yendo de ventanilla en ventanilla, sin ningún éxito, luego fuimos a la embajada de Nueva Zelanda que nos dieron la solución, otro día para localizar un traductor que nos haga una traducción jurada del carnét de conducir, otro día al colegio de traductores a que la legalicen y por fin después de unos cuantos días y unos cuantos pesos, lo conseguimos!, a que ahora a ser turistas otra vez, visita a la Catedral, a la Casa Rosada, vemos a las madres de la Plaza de Mayo reclamando (impresionante la dignidad de estas mujeres), damos un paseo por el puerto Madero, cruzamos el puente Calatrava...

En la calle Corrientes vemos a una multitud gritando y montando mucho escándalo, nos emocionamos pensando que es una cacerolada, pero no, están aplaudiendo a una escultura del "Che" que pasean encima de un camión (debe ser el aniversario de algo), visitamos el museo de la ciudad (poca cosa, era gratis), entramos al hall del Ministerio del Interior a ver una exposición de las Malvinas (todo lo que estamos aprendiendo, siempre hay una versión b), y...ALELUYA!!!! por fin localizamos "El Manillar", y por supuesto no compramos una, sino 5 revistas, así que ya tengo a Osquitar tan contento y yo por fin dejare de tener pesadillas.


Pasamos por muchas librerías, pero en ninguna nos quieren cambiar los libros, como son!. Volvemos a comer locro, uhhhh! otra tarde entera haciendo la digestión. Visitamos el cementerio de La Recoleta, el museo del automóvil, el museo de Bellas Artes (muy completito). Ahora ya no comemos "panchos", sino "superpanchos", je, je

Por supuesto fuimos a La Boca y paseamos por el Caminito, damos una vuelta al estadio de fútbol y visitamos el Museo-Estudio-Casa de Bellas Artes de Benito Quinquela

Martín y desde la azotea, que tiene muy buenas vistas del puerto, nos marcamos un tango, bueno, en verdad solo posamos para la foto, tuvimos que hacer muchas para conseguir esta medio decente (o sea imaginaros el resto).

Todo esto nos parece muy turístico y nos agobia un poco, parejas de tango para hacerte la foto con ellos, un doble de Maradona, puestos por todos lados, gente arrastrándote a sus bares, restaurantes Aggg! Así que nos vamos hasta el antiguo Puente Transbordador que casi es lo que mas nos gusta (que raritos somos, je, je).

Seguimos de turismo por Buenos Aires así que paseitos por las calles peatonales, plazas, el barrio de Palermo Viejo, callejeamos, vemos un jardín botánico, disfrutamos de un show de tango gratis en un centro cultural, (así que tan contentos), viajamos en "subte" (para nada lo echamos de menos), cenamos en el hostal con vinito de Mendoza, uhhh!, Conseguimos los billetes a Nueva Zelanda y a Bangkok (que no fue fácil, gracias Chema), visitamos el barrio de San Telmo, vemos el parque Lezana, una iglesia ortodoxa rusa, curioso! y en el parque unos abuelitos jugando al ajedrez, así que para allá que vamos.


Hicimos una escapada a Uruguay, tomamos un barco que por el rio de la Plata nos llevo a Colonia de Sacramento antigua colonia portuguesa, ciudad que nos traslada a otra época, callejuelas de piedra, restos de fortificaciones, construcciones antiguas de estilo colonial portugués y casas de ladrillo típicas de la arquitectura española.




La ultima noche en Buenos Aires la decidimos pegarnos el homenaje del mes, asique vamos al "Cafe Tortoni" un clásico de la ciudad, y vemos un maravilloso show de tango, que nos deja con la boca abierta.


Al día siguiente, limpieza y reestructuración de mochilas, a comer un tercer locro (a saber cuando volvemos a probarlo) y para el aeropuerto a hacer la digestión, allí montamos el show embalando nuestras mochilas (Ces, no sabes lo que ha dado de si tu cinta), la gente lo flipa. El vuelo se retrasa un poco, pero luego el viaje tranquilito, escuchamos tango, dormimos, cenamos, dormimos, leemos, dormimos, desayunamos, dormimos, y despues de 13 horas llegamos a Auckland, ?y ahora que?, sorry, and now what? je, je

6 comentarios:

Agus-tincho dijo...

que fotos, que paisajes!! chicos, disfrutenlo muchisimo, me encanto el blog! felicitaciones, me quedaré dando vueltas por la pagina y seguiré leyendo y viendo mas fotos, increible el viaje que estan haciendo, muy muy bueno!!
un arbazo y ucha suerte!!
Agustincho

Anónimo dijo...

Ei ! me encantan vuestras fotos haciendo el chorra. Madrid en agosto no esta tan mal.... deberias venir.... (me mudo a Murcia en dos meses!). Bueno, que muchos besos
(he votado para que vengan tres, por cierto, asi que animo!!!)

Anónimo dijo...

parace que trodo os sigue yendo muy bem, espero q asi sea y q volvais yenos de ilusoión para volver a introduciros en el engranaje del sistema capitalista y agradecer las migajas de pan dadas por un puesto de trabajo q agaradecer hasta el final de vuestros días.
Si podeis, no volvais ninguno de los 2 a esta mierda de PAIS.

Anónimo dijo...

Y volver, volver, vooolverrrrr!
y poneros a procrear que eso tambien es muy divertido. Yo he votado porque volvais 3je,je.
La foto del tango me encanta.
Un besin. Elena Leal.

Anónimo dijo...

Pasadlo bien que es una vez en la vida.
Estamos deseando ver vuestras andanzas por tierras australianas. ¿Para cuándo el post?

Saludos de Adolfo desde las catacumbas

Anónimo dijo...

Qué recuerdos, y qué envidia tio. Estaba deseando leeros desde Argentina.
Qué putada perder tanto tiempo en conseguir papeles para poder continuar, porque sin duda hay mucho por ver.
Yo desde luego, tengo que volver.
Un abrazo chicos, y prometo no volver a dejar tanto tiempo sin animaros desde este blog. Porque esto dura y dura, no? qué campeones!!
Cuidense